EL ESPERPENTO NACIONAL

Hay dias en que uno no sabe donde meterse. Días en que uno siente vergüenza ajena de ver como se destripan, los amigos del amigo, los novios de un ex, la vecina del barrio de toda la vida, contando intimidades y secretos de alguien que hasta hace unas horas era un ser anónimo como tu y como yo.
Acaso alguien ha pensado en algún momento que nos interesa saber que comieron ayer los marqueses de Puturrú, o los condes de Banban?, si les va bien su vida sexual, o si opinan que el escorbuto es una enfermedad que nunca les afectará?. Acaso realmente hay alguien a quien le preocupe si el niño de la folclórica aprueba o suspende un examen, o tiene una novia mas o menos guapa, o si el torero de moda, usa o no slips?
Pero lo peor de todo este esperpento, es cuando unos parlanchines que dicen llamarse periodistas y que en realidad son fiscales frustrados, (porque en realidad se quivocaron de carrrera)preguntan a modo de juicio, si no es mas cierto que te acostaste con Luisma antes que con Juanpi?, y que en tu juventud eras un poco ligerita de cascos¡¡¡. Esto es solo escoria.
Día tras día, nos encontramos con el morbo de las preguntas, en las que parece que cuanto mas mal educado seasn (para preguntar o para responder) mas probabilidades de pasar a la historia de los culebrones, y de hacer historia por ser insolente, maleducado o en fin a-social. Junto con las respuestas tímidas o a veces de exclusiva ( o incluso inventadas), para mantener abierto el grifo de los ingresos, y el interrogatorio inquisitorial, burlándose de nuestra inteligencia. Todo ello es un coctel explosivo, de intolerancia e insolidaridad, cuando a los errores que todo ser humano puede cometer, se les añade, el morbo, y regocijo de un "te pillé".
Que tenemos que hacer los sufridos telespectadores, para que ustedes dejen de verter sus vómitos olvidadizos, y revienta estómagos, sobre nuestros oídos día a día haciendo que sea importante algo que no merecería ni un simple comentario de verduleras en la esquina del mercado, o de machos hispánicos en lo alto de un andamio. Como tienen la osadía incluso de llevar determinadas afirmaciones a los telediarios? No hay noticias importantes no hay cosas grandilocuentes o sensacionalistas en el mundo de las personas normales? No hay guerras y niños maltratados que mueren de hambre?, no hay derechos humanos vulnerados? No quieren enseñarnos los nuevos avances de la lucha contra el cáncer?, o las consecuencias de tener cerca la intolerancia?, no hay como explicar la violencia en las aulas? Como se hace el turrón, o como se puede apadrinar un burro, (hoy especie a extinguir en nuestro país), como se puede transformar un dia de fiesta de un día laborable, o que podemos hacer para sorprender a nuestros seres queridos? ¿no hay nada que decir salvo cuantas veces han salido determinadas familias a la tele a explicar sus inmundicias sociales, y familiares, y las peleas por determinadas herencias,?
En fin que lamentablemente nos importa mas la basura que emanan las vísceras carroñeras de quien no aprecia en absoluto su vida, y mucho menos las de los que le rodean.
Lamentablemente últimamente el diálogo familiar tiene que tener a todo el país por testigo para hacer las paces de una guerra que nunca debió llegar, porque para eso están las mesas camilla familiares, para eso están los cumpleaños, las navidades, los homenajes, los aniversarios, o los días de sol, los lunes, los martes o los domingos, de abril, junio o noviembre. Pero TRISTEMENTE todavía hay quien prefiere que todos nos enteremos de los errores cometidos, para pasado el programa de moda, y cobrado la cantidad establecida volver a las andadas, e incluso ir mas allá hasta el punto de que después de jurar amor eterno y llorar ante las cámaras una reconciliación, se lance como un tigre a su presa con un puñal en la mano a quitarle la vida, a alguien ANONIMO hasta ese momento, y que a partir de entonces será nuevo protagonista en la boca de quien quiere ser aun más protagonista porque tuvo "algo que ver" en "cualquier momento de su vida" con quien no pensaba pasar a la historia de la televisión y mucho menos en uno de esos programas enfermizos.
Paloma.