POPEE DE CIRE

Quien me conoce, sabe que no miento cuando me declaro melómana empedernida.
Mi vida sin la música no es nada...
Pierde todo su sentido...
Eso es así porque tengo una madre, que me cantaba al oído para dormirme y no solo nanas...
Así, lo hice también con mi hijo aunque hubo quien me recomendaba no hacerlo por el bien de mis riñones... tengo que reconocer que valió la pena y que no me arrepiento de ello, es mas aconsejo a esas madres jóvenes y nuevas a que experimenten la sensación de dormir a su bebé susurrandole una preciosa canción de amor.
Todo esto, ,ha hecho que hoy tenga la necesidad irrefrenable, de coleccionar mis canciones, las que acompañaron mi vida...
Porque los sonidos son como los sabores, los olores y los paisajes, ellos nos retrotraen al recuerdo con mayor facilidad.
Cuando me paro a pensar cual fue la primera canción que me gustó, a parte de todas aquellas que me cantó mi madre al oído, es decir, la primera canción, que me gustó por iniciativa propia, siempre pienso en la misma...
POUPEÉ DE CIRE.
Esta canción que Francia llevó al Festival de Eurovisión, cuando el Festival de Eurovisión tenía entidad, y no se había convertido en el esperpento que hoy es. Mis padres me hicieron cantarla, delante de los amigos, porque no dejaba de ser gracioso, que una pequeña niña de tan solo 3 años, cantara en un francés inventado POUPEÉ DE CIRE, entonces la canción del verano.
Aún hoy recuerdo su letra y hoy si hablo francés, por tanto entiendo lo que dice su letra.
Y es cierto, una muñeca era yo en aquella época... una muñeca, que el tiempo se ha encargado de transformar en una mujer que no olvida su primera canción, y es capaz de contar la experiencia de cantarla mientras todos me miraban con cara de mirar efectivamente a una muñeca...que cantaba en francés inventado.
Hoy me he sorprendido, al ver que existe una versión completamente actual de la misma de Nena Da Conte, versión en Castellano, que ha perdido unas pocas revoluciones ... como mi vida misma